El domingo 3 de junio hemos tenido la alegría de una nueva incorporación a la Asociación Eucarística: Pablo Gasco. Su padrino fue Antonio Morales. Le acompañó su esposa, Maica, que, con su marido, pudo conocer a muchas personas de la Asociación, que les saludaron con gran afecto.
Por ser la solemnidad del Corpus Christi, era para nosotros un día de especial importancia, por la finalidad eminentemente eucarística de nuestro Oratorio. En la homilía, D. Juan, entre otros aspectos relacionados con la importancia de la eucaristía en la vida cristiana, recordó al Caballero de Gracia y a la fundación de la Congregación del Santísimo Sacramento, entonces así llamada, por la cual estamos nosotros aquí. Un buen momento para darle gracias y encomendar la buena marcha de su proceso de beatificación.
Al terminar la Santa Misa hubo procesión del Santísimo por el interior del templo: es, sin duda, un momento de especial solemnidad: el Santísimo bajo el palio —llevado por Julio, Rafael Angel y Sebastián—. Jesús, delante, con el incensario y Sergio con la Cruz procesional.
Por la tarde, un buen grupo participó en la procesión de la diócesis, con salida desde la Catedral. Rafael, Pedro, Julio y Ángel llevaron el estandarte de la Asociación. Otros muchos desfilaron junto a él en la procesión. Las palabras finales de Mons. D. Juan Antonio Martínez Camino, inmediatamente antes de la bendición con el Santísimo, en la plaza de la Armería llena de fieles, resultaron muy piadosas y emotivas.